Juan Merallo nos envia esta magnifica carta de despedida:
Hace dos años me apartaba momentáneamente de la militancia ciclista, debido a problemas personales. Pero ahora ha llegado el momento de anunciar que abandono definitivamente el activismo ciclista.
Han sido 21 años con una fuerte responsabilidad en Pedalibre, ConBici y los últimos años en la Mesa de la Bicicleta. Empleando varias horas de mi tiempo y energía cada día para la reivindicación ciclista durante todo ese tiempo. Dedicando días de vacaciones para ir a reuniones, congresos (algunos en el extranjero), comprometiendo mi vida personal en ocasiones.
Tiempo que podía haberlo dedicado con mi familia, con mi pareja, con mis amigos, haciendo cosas que me gustan. Me tuve que privar de muchos momentos que ya no van a volver, pero los doy por bien empleados. Han sido unos fabulosos años de mi vida y seguro que se entiende que ahora, cuando menos, decida usar ese tiempo para esas cosas que no hice en su día. Para dedicar ese tiempo para mí y los míos.
Esos años me han dado muchas satisfacciones, pero no hay que olvidar que esto era un trabajo voluntario. El último año de activismo me empezó a parecer una carga demasiado pesada y cada vez que me llegaba algo en que comprometerme, en vez de asumirlo como un reto (que es lo que hice durante todo este tiempo), empezaba a asumirlo como una losa, como una carga más que me impedía dedicar más tiempo a aquello que era también necesario e incluso imprescindible.
Un amigo me decía hace poco que cómo iba a dejar esto ahora, en este momento dulce de la bicicleta. Quizás mi trabajo fue ése, el de ayudar a abrir el camino entre la generalizada incomprensión por este fabuloso medio de transporte y ocio.